Desde pequeños experimentamos el descubrir con cierta sospecha, la sospecha de una realidad que nunca se nos presenta completa. Sin embargo, el sentimiento que deviene de la experiencia de descubrir es un sentimiento de síntesis que se expande de lo particular a lo general.
Santiago del Conde, en su práctica como artista, desarrolla y cancela constantemente estrategias que guían al descubrimiento. Entre sus colecciones de objetos, que se presentan en esta exhibición, se revelan relaciones antes desapercibidas. En sus textiles de papel como en sus dibujos conviven opuestos que crean nuevos significados (fragilidad/fuerza, unión/fragmentación). Dichos cuestionamientos ó estrategias son presentadas siempre de una manera natural, ligera y sin pretensiones, como un niño que vive un sentimiento por primera vez y no duda de su veracidad.
“La emergencia del descubrir” es una exhibición que despierta, desde una óptica cándida y de juego, la curiosidad por el mundo y sus relaciones. Donde se aprende a observar, se aprende a curiosear, a rememorar y a enternecer.
